La hegemonía militar de España en Europa durante los siglos XVI y XVII se basó en una legendaria unidad de combate: los Tercios. Actuaron desde Nápoles y Milán hasta Flandes y la frontera con Francia.
Reconocidos como la mejor infantería del mundo, sus tácticas fueron imitadas por las más modernas unidades de combate, incluidos los famosos “grupos de combate” alemanes en la Segunda Guerra Mundial.
Su radio de acción cubría toda Europa, pero fue en los Países Bajos donde protagonizaron los episodios más célebres. De aquí que su nombre allá pasado a la Historia como “Tercios de Flandes”.
A mediados del siglo XVI Europa estaba en guerra: resultante de los enfrentamientos entre Carlos I y Francisco I de Francia, las guerras religiosas en Alemania y la lucha con los otomanos en el Mediterráneo.
En 1566 se abrió una nueva brecha en Flandes, cuando los súbditos de Felipe II se negaron a aceptar un mayor control religioso y político. Las ideas de Calvino y las corrientes nacionalistas arraigaron en los Países Bajos.
A esta crisis acudió el Duque de Alba con los tercios italianos. Felipe II sabía que Flandes era “la puerta” que comunicaba España con Inglaterra y Francia.
La hegemonía de los Tercios de Flandes sobre un tablero de juego: pixeles y picas en «Pike and Shot» https://t.co/CIfCwp7I16 pic.twitter.com/E0iVwggy38
— Baltazar Cardenas (@baltacar0982) 24 de febrero de 2017
Por otro lado estaba claro que mientras se combatiera allí, la guerra estaría lejos de la península. Así que no se dudó en llevar el conflicto a tierra del enemigo. Por este periodo se recuerda la denominada “furia española”, cuando los soldados españoles asaltaron Amberes.
Otro episodio famoso fue la rendición de Breda en 1625, tras nueve meses de sitio. Un rasgo característico de los tercios era la posibilidad de ascender a partir de los propios méritos y sin tener en cuenta el origen social del que se provenía. Esto, en una Europa estamental, era algo excepcional y sin duda una buena motivación para los soldados.
No faltan ejemplos de humildes soldados que llegaron a mandar tercios como Francisco Verdugo que de soldado raso llegó a ser Gobernador de Groninga (Holanda).
La contienda se alargó hasta 1648 (con una tregua 1609 – 1621) cuando se reconoció la independencia de los Países Bajos. Pero antes de esto, en la batalla de Rocroi (1643), los tercios fueron derrotados por los franceses. Marcando el declive de la dominación española.
Lo cierto es que la vida como terciario no era nada fácil. Los continuos roces con la población civil, la escasez de comida, habitar una tierra extraña, saqueos que hacían perder el norte de la justicia, focos de epidemias en un mundo sin vacunas ni prevención y sobre todo la continua escasez de dinero, que provocaba continuos motines: entre 1572 y 1607, hubo 45 motines.
Todo esto, más la cantidad de frentes abiertos: flamencos, franceses, ingleses… hicieron claudicar a los poderosos tercios.
Fuente: HISTORIA National Geographic, número 39.
no esta mal me gusta y estoy pensando de poner una zona de historia