La evidencia arqueológica más característica es el talayot o torre de piedra. Mampostería de planta circular o cuadrada y cuerpo troncocónico.
La cultura talayótica balear recibe las aportaciones de las colonizaciones mediterráneas y tiene las mismas connotaciones culturales que el resto de las islas del mediterráneo. Los materiales arqueológicos son muy variados: cerámicas decoradas con digitalizaciones. Frutos del comercio: objetos metálicos, destacando espadas, hachas y objetos de adorno.
El ritual funerario no se conoce bien, aunque hay documentadas inhumaciones en cuevas naturales y en cementerios con tumbas individuales, dobles o múltiples, con coberturas de losas.
Hay abundantes monumentos denominados navetas, construcciones de piedra en forma de nave invertida de planta elíptica, cubiertas con falsas cúpulas, sus funciones pudieron ser de habitación o de cámara funeraria.
Los conjuntos talaýoticos más notables son: los de Ses Paisses, Son Oms, Can Daniel Grand y Rafal Roig y Cova des Pas.
En Menorca salen a nuestro encuentro excepcionales muestras de la cultura talayótica, aparecida en torno al 1100 aC https://t.co/hh21zk43lQ pic.twitter.com/C6QuHKtg0f
— HistoriaIberiaVieja (@HistoriaIberia) 12 de julio de 2017
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