Se desarrolla a lo largo de casi todo el II milenio, esencialmente en Rumanía y Moldavia; destacando los yacimientos de Sarata-Monteoru.
Tiene cerámicas cordadas, tumbas cubiertas de ocre y hachas planas de cobre. Se divide en fases clásica caracterizado por una cerámica con vasos de asas altas y grandes recipientes. Se aprecie un tipo de sociedad estratificada, con grandes diferencias sociales.
La necrópolis esta normalmente situada cerca de los poblados, constituidas por tumbas individuales en la que los ajuares denotan grandes diferencias de estatus. Ricos ajuares con anillos, pendientes, cuentas de pasta vítrea, objetos de oro, plata y ámbar.
La economía se basaba en la agricultura de trigo, cebada y mijo, así como la explotación de la sal.
En su fase tardía comienza el declive cultural, con la introducción del ritual de la incineración.
Deja una respuesta