Alemania sigue reconciliándose con su pasado de una manera seria, reflexiva y honorable. Hace años descubrieron una placa donde se encontraba el bunker de Hitler y últimamente son muchas las exposiciones y muestras que se están organizando en el país sobre el III Reich.
Ahora la Oficina Federal de lo Criminal (BKA) presenta un informe que investiga la sombra nazi que siguió pesando sobre la institución una vez acabada la II GM. El estudio analiza las repercusiones que tuvo sobre la BKA la presencia en sus filas de viejos policías que habían militado en el régimen nacionalsocialista.
Entre los años1933 y 1945, la BKA se convirtió en una herramienta de represión de Hitler. Terminada la guerra, 47 policías ingresaron como altos funcionarios en la BKA procedentes de las SS hitlerianas. La presencia de estos individuos en la policía tuvo sus consecuencias: se comprobó que intentaron seguir aplicando criterios criminalísticos de la época nazi. Organizando acciones contra presuntas conspiraciones judías y comunistas; o acciones discriminatorias contra minorías como las etnias gitanas.
Hmmm, Twitter had mijn retweet over de Islamistisch Bosnische SS Handschar divisie onder Hitler verwijderd.
Zelf nog een maken dan. pic.twitter.com/vgKB8EbUYS— ? Hofman?? (@Gretige) 25 de octubre de 2017
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