En el siglo XIV, el Castillo de Naraío se erigía como símbolo del feudalismo en medio del valle del río Castro, en la localidad ferrolana de San Sadurniño. El castillo fue abandonado en el siglo XVII.
Actualmente es el ayuntamiento de la localidad el que posee por 30 años los derechos del inmueble; que realmente pertenece a la Casa de Alba.
A día de hoy, el castillo se encuentra en un estado ruinoso, pese a ser BIC. El expolio de la piedra lo ha invalidado como destino hostelero y se encuentra confundido entre la vegetación. Entre sus ruinas, se conserva principalmente la Torre del Homenaje.
En 2008 y 2009 se desbrozó el interior del castillo, se quitaron escombros y se hizo acopio de sillería para utilizarla en una futura remodelación. También se desarrollaron trabajos de arqueología y catalogación de los fondos encontrados, además de consolidar algunos muros. Cuando esa fase, y su subvención, terminó en junio del año pasado, el castillo ha quedado nuevamente abandonado.
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