Con la derrota alemana en Túnez (11 mayo 1943), la invasión de Sicilia por los aliados (10 julio 1943) y el derrocamiento de Mussolini (25 julio 1943); los exiliados comunistas españoles del norte de África (la mayoría en Argelia) se convencieron de la inminente derrota de las potencias del Eje y como consecuencia siguiente, la caída de Franco.
Tras el desembarco aliado en el norte de África durante la II Guerra Mundial, los americanos entraron en contacto con exiliados españoles en Orán, Argel y Melilla donde el PCE contaba con bases de operaciones.
Los servicios secretos de inteligencia americanos los formaron, con la intención de enviar guerrilleros a Andalucía a fin de establecer allí una red de cédulas comunistas.
La primera partida que llegó a territorio español lo hizo en Melilla (enero de 1944), pero fue detectada y encarcelada rápidamente.
Para el traslado de guerrilleros a España, el PCE contaba con dos barcos en el norte de África aparte de varios pesqueros afines. También se utilizó Gibraltar como base para introducir material.
En mayo desembarcaron varios comandos en las costas de Almería y Granada en misión propagandística. Instruidos y equipados por los americanos.
Prácticamente no llegaron a entrar en acción: cuando fueron detectados, el régimen, provocó una enérgica protesta a través del Ministerio de Asuntos Exteriores (fechada la vísperas del desembarco en Normandía) y Washington puso fin a estas actividades.
Con la llegada de Santiago Carrillo en el verano de 1944 se puso fin a las operaciones.
Fuentes:
Atlas de la Guerra Civil española. Fernando Puell y Justo A. Huerta. Madrid. 2007.
El PCE y la organización de la resistencia armada al franquismo: el ejército nacional guerrillero (1943-1946). Antonio Ortiz Mateos.
Deja una respuesta