Se desarrolla en gran parte del norte de la península itálica, sobre los territorios de Lombardía, el Véneto y Trentino. Se ha sistematizado en dos grandes fases: Polada I y Polada II.
Se trata de poblados situados en ambientes lacustres, en zonas próximas a lagos o en sus orillas, sobre terrenos cenagosos. Este tipo de asentamientos ha dado lugar a Poblados Palafíticos, que eran casas de planta rectangular, circular u oval. El otro grupo se denomina Bonifiche, especies de plataformas de madera superpuestas que formaban un piso sobre el que se situaba la vivienda.
Los materiales arqueológicos más significativos son los elementos líticos tallados (puntas de flecha) y pulimentados (hachas y azuelas), las hachas planas de cobre, a veces con ligeros rebordes. Los brazaletes de arquero y la cerámica campaniforme aparecen como elementos que pervive en la fase de formación.
En Polada II la metalurgia está mucho más desarrollada que en Unetice. En la cerámica siguen predominando las formas redondeadas y carenadas.
Era una sociedad que se dedica a la agricultura cerealista y a la ganadería de cabras y ovejas, cerdos y vacas, con actividades subsidiarias de pesca y caza.
Utillaje autóctono, casi siempre de materiales perecederos: arcos, piraguas, hoces, arados…Se han hallado restos de ruedas de madera maciza, arcos de caza, arados para la agricultura.
El ritual funerario se conoce muy poco. La presencia de objetos exóticos, como el ámbar y la pasta vítrea.
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